Web 2.0
La Web 2.0 es un concepto que surge en el año 2004, de la mano de Tim O’Reilly, quien lo utiliza para hacer referencia a una “segunda generación de la Web” que se basa en el trabajo en comunidades de usuarios donde el principal objetivo es el intercambio de información y el trabajo colaborativo.
Desde un punto de vista técnico, Xavier Ribes, define a la Web 2.0 como:“todas aquellas utilidades y servicios de Internet que se sustentan en una base de datos,la cual puede ser modificada por los usuarios del servicio, ya sea en su contenido (añadiendo, cambiando o borrando información o asociando metadatos a la información existente), bien en la forma de presentarlos, o en contenido y forma simultáneamente."
(XAVIER RIBES, 2007)
Según lo expresado anteriormente, podemos afirmar que la Web 2.0 se caracteriza por la colaboración y la socialización de la producción de información: el uso de la Web está orientado a la interacción y a las redes sociales. Los sitios Web 2.0 actúan más como puntos de encuentro, o webs dependientes de usuarios, es decir, que la Web 2.0 pasa a ser una plataforma colaborativa en donde se crean los contenidos personalizados de acuerdo con las preferencias, demandas y necesidades de los usuarios. Ellos son los que adquieren protagonismo, ya que pasan a ser los creadores de lo que sucede en la Web.
“Nuevas aplicaciones web, de uso libre y que simplifican tremendamente la cooperación entre pares, responden al principio de no requerir del usuario una alfabetización tecnológica avanzada para su utilización. Estas tecnologías de reciente masificación, estimulan la experimentación, generación y transferencia de conocimientos individuales y colectivos.”[1] Podemos ver que en el campo de la educación, la Web 2.0 representa un desafío hacia las prácticas tradicionales: las herramientas que nos proporciona permiten pensar en un aprendizaje multidireccional. La información no se distribuye de manera lineal, ya que, más que una cadena de información, la Web 2.0 resulta una red de comunicación dotada de significado.
Las tecnologías de hoy favorecen el aprendizaje en red, no es un aprendizaje lineal sino social, es decir, aprender utilizando la web 2.0 implica hacer, construir y compartir con otros. Las principales características de esta web están dadas por:
Interactividad: la relación entre pares es inmediata, con una interacción sincrónica y asincrónica.
Aprendizaje colaborativo: propicia el trabajo grupal, permite el aprender con otros y de otros a través del intercambio de ideas y tareas.
Multidireccionalidad: permite el multiple acceso a la información Libertad de edición y difusión: todos pueden editar sus trabajos y difundir sus ideas en la web.
Esta Web 2.0 no es otra cosa que la imparable evolución de Internet hacia cotas cada vez mayores de interacción y, sobre todo de colaboración. La participación de los ciudadanos en esa Web, cada vez se hace de forma más sencilla, amigable e intuitiva. En esta evolución no es conveniente olvidar conceptos como el de la Web semántica que supone un serio avance en la clasificación, estructura y anotación de los recursos con semántica entendible por las máquinas que han de procesarlos. Ante el caos de recursos y desorganización de la propia Web, nació la Web semántica con el fin de dar racionalidad, fluidez y eficacia a toda la información y recursos a través de tecnologías capaces de describir de forma explícitas los contenidos y, a través de lenguaje de marcas, los datos y la relación entre éstos. No cabe duda que la Web 1.0 junto a las tecnologías que propiciaron los metalenguajes y los estándares de representación de la Web semántica complementan de forma determinante la Web 2.0.
Mientras que en la Web semántica lo que destaca son los procesadores mecánicos que organizan los datos y contenidos, en la 2.0 la relevancia la muestran los propios interesados, su participación, en definitiva el protagonismo de los social como indicábamos antes.” (GARCÍA ARETIO, 2007)
Pensando en las oportunidades que ofrecen las herramientas de la Web 2.0 para la educación, el autor propone un uso racional de las tecnologías, ya que éstas “no nos ofrecen otra cosa que facilitación para la profundización en principios y finalidades pedagógicas que van a propiciar la mayor eficiencia de la enseñanza y el aprendizaje”.
[1] Capítulo 1 y 2 del libro: Planeta Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast food
La Web 2.0 es un concepto que surge en el año 2004, de la mano de Tim O’Reilly, quien lo utiliza para hacer referencia a una “segunda generación de la Web” que se basa en el trabajo en comunidades de usuarios donde el principal objetivo es el intercambio de información y el trabajo colaborativo.
Desde un punto de vista técnico, Xavier Ribes, define a la Web 2.0 como:“todas aquellas utilidades y servicios de Internet que se sustentan en una base de datos,la cual puede ser modificada por los usuarios del servicio, ya sea en su contenido (añadiendo, cambiando o borrando información o asociando metadatos a la información existente), bien en la forma de presentarlos, o en contenido y forma simultáneamente."
(XAVIER RIBES, 2007)
Según lo expresado anteriormente, podemos afirmar que la Web 2.0 se caracteriza por la colaboración y la socialización de la producción de información: el uso de la Web está orientado a la interacción y a las redes sociales. Los sitios Web 2.0 actúan más como puntos de encuentro, o webs dependientes de usuarios, es decir, que la Web 2.0 pasa a ser una plataforma colaborativa en donde se crean los contenidos personalizados de acuerdo con las preferencias, demandas y necesidades de los usuarios. Ellos son los que adquieren protagonismo, ya que pasan a ser los creadores de lo que sucede en la Web.
“Nuevas aplicaciones web, de uso libre y que simplifican tremendamente la cooperación entre pares, responden al principio de no requerir del usuario una alfabetización tecnológica avanzada para su utilización. Estas tecnologías de reciente masificación, estimulan la experimentación, generación y transferencia de conocimientos individuales y colectivos.”[1] Podemos ver que en el campo de la educación, la Web 2.0 representa un desafío hacia las prácticas tradicionales: las herramientas que nos proporciona permiten pensar en un aprendizaje multidireccional. La información no se distribuye de manera lineal, ya que, más que una cadena de información, la Web 2.0 resulta una red de comunicación dotada de significado.
Las tecnologías de hoy favorecen el aprendizaje en red, no es un aprendizaje lineal sino social, es decir, aprender utilizando la web 2.0 implica hacer, construir y compartir con otros. Las principales características de esta web están dadas por:
Interactividad: la relación entre pares es inmediata, con una interacción sincrónica y asincrónica.
Aprendizaje colaborativo: propicia el trabajo grupal, permite el aprender con otros y de otros a través del intercambio de ideas y tareas.
Multidireccionalidad: permite el multiple acceso a la información Libertad de edición y difusión: todos pueden editar sus trabajos y difundir sus ideas en la web.
Esta Web 2.0 no es otra cosa que la imparable evolución de Internet hacia cotas cada vez mayores de interacción y, sobre todo de colaboración. La participación de los ciudadanos en esa Web, cada vez se hace de forma más sencilla, amigable e intuitiva. En esta evolución no es conveniente olvidar conceptos como el de la Web semántica que supone un serio avance en la clasificación, estructura y anotación de los recursos con semántica entendible por las máquinas que han de procesarlos. Ante el caos de recursos y desorganización de la propia Web, nació la Web semántica con el fin de dar racionalidad, fluidez y eficacia a toda la información y recursos a través de tecnologías capaces de describir de forma explícitas los contenidos y, a través de lenguaje de marcas, los datos y la relación entre éstos. No cabe duda que la Web 1.0 junto a las tecnologías que propiciaron los metalenguajes y los estándares de representación de la Web semántica complementan de forma determinante la Web 2.0.
Mientras que en la Web semántica lo que destaca son los procesadores mecánicos que organizan los datos y contenidos, en la 2.0 la relevancia la muestran los propios interesados, su participación, en definitiva el protagonismo de los social como indicábamos antes.” (GARCÍA ARETIO, 2007)
Pensando en las oportunidades que ofrecen las herramientas de la Web 2.0 para la educación, el autor propone un uso racional de las tecnologías, ya que éstas “no nos ofrecen otra cosa que facilitación para la profundización en principios y finalidades pedagógicas que van a propiciar la mayor eficiencia de la enseñanza y el aprendizaje”.
[1] Capítulo 1 y 2 del libro: Planeta Web 2.0. Inteligencia colectiva o medios fast food
No hay comentarios:
Publicar un comentario